“Se le ocurrió a Humberto la idea de cruzar la frontera el próximo sábado para ir a ver esa película prohibida de la que todo el mundo hablaba, El último tango en París.
– Total, no es más que pasar a Francia, como otras veces.
Los dos amigos asintieron.
Era ya muy de noche cuando entraban en Irún”.
Así comenzó la noche el 24 de marzo de 1973 para Humberto, Fernando y Jorge, tres jóvenes que partían a Irún para ver una película que les hacía muchísima ilusión. Pero, la que iba a ser una grata experiencia se convirtió en el último día de sus vidas, ya que un grupo de miembros de ETA los confundieron con policías. A partir de ahí los secuestraron y los torturaron hasta la muerte, una decisión tomada en un momento en el que la banda se encontraba expuesta a un clima de desconfianza continua, con avisos de delaciones y de chivatadas recurrentes.
Inspirándose en estos hechos reales, el escritor, traductor y articulista vallisoletano Adolfo García Ortega crea una novela cuyos protagonistas son estos tres jóvenes de fatuo destino y se adentra también en la cara menos amable de la realidad. Una tumba en el aire busca entender, comprender los posibles porqués de lo acontecido, y mostrar la complejidad de la lucha terrorista que imperaba en aquellos años previos al remate de la dictadura franquista.
Una tumba en el aire, ganadora del Premio Málaga de Novela, destaca por su respecto hacia los hechos y por ser un ejercicio libre, independiente y de justicia histórica, pues parte de la idea de que para que los muertos puedan descansar es necesario que la familia llegue a conocer qué sucedió realmente. Y eso es lo que hace García Ortega: llenar de luz los huecos donde había sombra, sumergirse en la mente de los protagonistas y de sus asesinos para intentar entenderlos, y ofrecer un poco de paz al caos.
Aunque pertenece a la ficción, lo cierto es que estamos delante de un producto con muchísimas dosis de periodismo, que recuerda un poco a las grandes crónicas, como A sangre fría de Truman Capote o los libros de Ryszard Kapuscinski, quien nos legó una de las mejores definiciones de la profesión: “los cínicos no sirven para este oficio”. Pues bien, una lee este libro sabiendo el terrorífico final, aunque siempre alerta de los entresijos, con un claro afán de llegar a saber, aunque con amenazas de caer en el intento. Con un ritmo trepidante, que te deja sin aliento en cada capítulo, Una tumba en el aire recoge, sin maquillaje, escenas donde asistimos a la maldad más primitiva del ser humano, donde no caben razones lógicas, y tan solo prima el instinto de supervivencia y de avance hacia adelante, cueste lo que cueste.
Sin duda, la historia que llevábamos tiempo esperando, pues nadie debería caer jamás en el olvido. Necesaria también porque, para que una democracia se asiente, se debe reconocer su historia, además de las personas que cayeron en el camino.
Ficha técnica
Autor: Adolfo García Ortega
Editorial: Galaxia Gutenberg
Año de publicación: 2019
Número de páginas: 333
Muy pero que muy interesante. TOmo buena nota, que no lo conocía.
Besotes!!
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