
Existen libros y autores que tienen a África muy presente. Quizás el ejemplo más claro sea Ryszard Kapuscinski, ese periodista polaco que revolucionó el periodismo y siempre defendió hasta su muerte las ideas de que el periodismo debía ser ejercido por personas que fuesen capaces de entender al otro u otros. Él defendía fervientemente que los cínicos no servían para este oficio, y nos acercó la esencia humana los problemas, sus causas y consecuencias, y se dirigió siempre a aquellos lugares a los que nadie iba porque no interesaba. Por eso fue a África y nos la presento con sus gentes, sus colores, sus ambientes, y su pobreza.
Por eso, cualquier escritor o escritora que se precie, y quiera hablar del continente negro no puede escapar de la figura de Kapuscinski, lo que bien se puede demostrar en Guinea, de Fernando Gamboa.

Es esta una novela de aventuras, que comienza cuando Blanca, una joven cooperante española llega a Guinea Ecuatorial para hacer un trabajo de investigación, y la detienen por no llevar su pasaporte. A partir de ahí comienza su calvario ya que huye de las autoridades acompañada de Gabriel, un joven nativo que también escapa de la justicia. Juntos atravesarán la selva, conocerán la amabilidad de los vecinos y vecinas de los pueblos por los que pasan y vivirán momentos duros pero también otros que dan paso a la distensión y a los momentos de tranquilidad.
A partir de la experiencia en Guinea, Blanca cambiará su forma de entender el mundo una vez que regresa a su País Vasco natal. El mundo occidental le parece vacío, sin sentimientos y con ciudadanos poco concienciados de lo que realmente ocurre en los países africanos.
Fernando Gamboa consigue crear una atmósfera muy descriptiva, con un ambiente que atrapa al lector, que semeja caminar por la selva con miedo de que te atrape un elefante, o una serpiente, o te quedes sumergido en un agujero imprevisto.
Ficha técnica
Autor: Fernando Gamboa
Editorial: El Andén
Año de publicación: 2008
Número de páginas: 384
No he leído nada de este autor. Y por lo que cuentas, voy a tener que empezar a pensar en hacerle hueco.
Besotes!!!
Me gustaMe gusta