El complot de las damas muertas

Jessa Crispin, autora de "El complot de las damas muertas"

Imposible resistirse ante el argumento de El complot de las damas muertas, el libro que escribió Jessa Crispin basándose en sus experiencias cuando al cumplir los treinta decidió hacer una pequeña maleta con lo imprescindible y viajar por Europa en busca de sí misma y también de los espíritus de intelectuales que, antes de ella, se habían sentido con ganas de conocer su verdadera identidad y sus prioridades en la vida. Por este motivo emprende un viaje por el Berlín de William James, el Trieste de Nora Barnacle, el Sarajevo de Rebeca West, el sur de Francia con Margaret Anderson, el Galdway de Maud Gonne, la Lausanne de Igor Stravincky, el San Petersburgo en el que recalón W. Somerset Maugham, el Londres de Jean Rhys, la Isla de Jersey con Claude Cahun y la Coda de Zakynthos. A través de estos parajes va entablando un diálogo con los personajes, pero también consigo misma, de forma que estamos ante un libro para leer con mucha calma, defensor del viaje como forma de conocimiento externo pero, sobre todo, interno.

El complot de las damas muertas es una propuesta muy original, situada a caballo entre el ensayo filosófico, la crónica de viajes y el alegato feminista, y por ello imposible de definir sin dejarse nada atrás. Y es que en cada una de sus páginas asistimos a reflexiones que nos llevan a debatirnos sobre la sociedad y todo el orden de cosas que defendemos habitualmente. Su virtud es, pues, poner todo patas arriba.

Personalmente, lo que más me ha impactado es la capacidad de la autora para indagar en otros puntos de vista distintos al hablar de los y las intelectuales y de su relación con el espacio. Un cuestionamiento que enriquece la visión que se tiene de ellos y que entronca directamente con su condición de mujer feminista, pues muchas de esas otras versiones tienen que ver con los porqués en torno a la condición de las mujeres que fueron invisibilizadas al lado de sus maridos. Así le aconteció a Nora Barnacle, mujer de James Joyce.

“Intento encontrar una historia sobre Nora que no tenga relación con James, pero no es fácil. Apenas quedan cartas de su puño y letra, y no hay diario. De las cartas obscenas de triste fama que Nora y James se intercambiaban solo han quedado las escritas por James (la otra mitad se ha perdido). Solo podemos adivinar el contenido de las de ella basándonos en las respuestas e él. Su vida es para siempre el lado que no se oye de una llamada telefónica”.

Se necesitan libros y mentes tan lúcidas e incómodas como las de Jessa Crispin, que nos aporten esas otras armas para pensar y cuestionarnos el mundo en el que vivimos. Cada una de estas páginas merece un análisis profundo y sosegado, sobre el que rehacer nuestro lugar en el mundo y cómo ejercer la plena libertad individual.

PD: Tengo un montón de párrafos subrayados y de esquinas de páginas dobladas. Es lo mejor que se puede decir de un libro con necesidad de ser recordado y de volver siempre a él.

Ficha técnica

Título: El complot de las damas muertas

Autora: Jessa Crispin

Editorial: Alpha Decay

Año de publicación: 2018

Número de páginas: 280

Escrito por

Graduada en periodismo y enamorada de la lectura y la cultura. Porque leer nos hace mejores personas.

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