
Siempre he creído que la lluvia es muy romántica, y hace que los sentimientos más puros afloren a la superficie de las personas más sensibles. Por eso en Galicia bien perfectamente podrían florecer a diario poetas y escritores herederos de esta lluvia inspiradora, y Lino Fervenza Faria es uno de ellos, un hombre soñador, polifacético y que siente la poesía como práctica común en sus pensamientos.
Regenta Lino una taberna de esas con encanto en la zona de A Fraga, en el municipio pontevedrés de Moaña, en la comarca de O Morrazo. En A Taberna de Lino la comida se mezcla con un ambiente inimitable como pocos hay en la zona, ya que el restaurante se construye a raíz de la vivienda del que fuera su abuelo, esa persona tan querida en la vida de Lino y del que nos habla ya en el primer poema de su libro Lluvia blanca, donde los versos son directos, con nombres y apellidos y que se dirigen desde el corazón más sentido a las personas de su vida. Él, que se define como un «poeta de la lluvia», no puede parar de cantarle a los pequeños detalles que forjan la felicidad de la vida.
«Poeta de la lluvia,
y también de la nostalgia,
me visitas en mi casa;
quédate y no te vayas.
Como te quiero, como te extraño,
siento que siento que ya me has mojado,
alboroto pasajero
de un sueño destilado».
Esas personas de la vida del poeta están aquí representadas con varios poemas en los que se refugia un amante de los versos de Bécquer, Machado o Rosalía de Castro. Pero no es esta una poesía grandilocuente, incomprensible, sino que es muy límpida y transparente, y así se enorgullece el autor al describirla. Y por si esa transparencia narrativa no fuese suficiente, el poemario se acompaña de unos preciosos esbozos que recuerdan su vida y sus seres queridos. Y es que, como me decía un amigo, si conoces bien al autor lo reconocerás en cada uno de los versos aquí recogidos. Ahí radica el encanto de Lluvia blanca.
Ficha técnica
Autor: Lino Fervenza Faria
Editoria: Ediciones Book Mundi
Año de publicación: 2015
Número de páginas: 63