Es una tarde lluviosa, acabo Mi querido Mijael, de Amos Oz, y comienzo Viaje en autobús, de Josep Pla. Ambos autores muy dispares pero que aportan su grano de arena a la complejidad del mundo. Los argumentos poco importan en este caso. Tan solo es un contexto para comentar que me encontré con una cita de Goethe que me hace reflexionar, y con la que inicio esta sección del blog.
«La felicidad es la limitación; ser feliz consiste en limitarse».
Esa es la frase que me sugiere que los instantes de felicidad cortos se disfrutan más. Y es que, si estoy con mi novio tras una larga espera veo ese rato como la felicidad máxima. Y si el instante es pequeño tanto mejor. Para el día siguiente, y el siguiente, guardaré las ganas, y no las agotaré de una sola tajada.
Todo eso por poner un ejemplo, ya que todo en la vida se disfruta más en instantes fugaces que siempre nos dejen con ganas de más.